“Reina mora eres tú” le cantaba Manolo Escobar a la provincia más árida de España: Almería. En plena Andalucía oriental, la provincia almeriense embruja con sus playas, alpujarra y desierto; un paraíso natural desconocido para muchos. Si no tienes plan para estas vacaciones, ¡atento! Almería puede ser tu próximo destino.
¿Qué nos ofrece Almería?
Almería, tierra de cine
Un desierto de 280 kilómetros cuadrados, el único desierto europeo, fue elegido como cuna del Spaguetti Western allá por las décadas de los 50,60 y 70. Lawrence de Arabia, Cleopatra o El bueno, el feo y el malo son algunas de las películas que se han rodado entre el desierto de Tabernas y el Parque Natural Cabo de Gata. Los Genoveses, la Isleta del Moro, Las Negras o El Plazo de Rodalquilar son playas idílicas y vírgenes que aparecen un poco más allá del desierto, casi un oasis en medio de la nada y también escenario de películas como Indiana Jones y la última cruzada o La Historia interminable. Sin duda, los amantes del séptimo arte tienen la visita obligada a la provincia.
Almería, ociosa y deportiva
¡Muévete! El Parque Natural Cabo de Gata ofrece múltiples actividades deportivas como kayak, submarinismo o paddle surf. Si lo tuyo no es el agua y prefieres sentirte como un auténtico explorador, en el pueblo de Sorbas podrás adentrarte en las grutas del Karst de Yesos, una formación cristalina llena de estalactitas, estalagmitas y corales.
Un plan para grandes y pequeños es la visita al parque temático Miny Hollywood (Tabernas), donde se recrean unos inmensos decorados de películas del oeste con actividades como el baile del can-can o un show de vaqueros a caballo.
¿Y por la noche? Un concierto de música alternativa en El Chamán (Los Escullos) a cielo abierto en el parque natural.
Almería y sus pueblos
Con sus calles blancas y empinadas, los pueblos de la alpujarra almeriense tienen ese encanto árabe que te traslada a otra época. Laujar de Andaráx o Cánjayar son imprescindibles para visitar: buena comida, naturaleza y una temperatura perfecta. Por la noche refresca, así que la rebeca bien a mano.
Si buscas relajarte en pequeños pueblos de costa, a parte de aquellos de los que ya hemos hablado en el Cabo, San Juan de los Terreros (pueblo limítrofe con la provincia de Murcia), Garrucha o Mojácar son buenos destinos para disfrutar de la playa, el pescaito frito y la fiesta.
¿Las mejores tapas? En Fernán Pérez (Níjar), en el bar de la plaza del pueblo. ¡No te puedes ir sin probar el conejo!
Almería, la capital
Parada obligatoria en Almería ciudad para visitar, al menos, la Alcazaba musulmana, la Catedral y el cargadero mineral, más conocido como Cable Inglés. En el centro de la ciudad (Calle Trajano-Plaza Virgen del Mar) encontrarás decenas de bares donde probar los platos más típicos: migas, caldo colorao, gurullos o un buen chérigan (tostada con alioli e ingredientes al gusto). Esta última invención del cocinero del Café Colón (Plaza Marqués de Heredia) allá por los años 50, debido a la forma alargada de la tapa, similar a la pistola del sheriff (sheriff gun).
Ni a John Lennon se le resistió Almería. Y es que, claro, con todos estos motivos, ¿quién no querría perderse en la tierra del cine?
¡Vamos a Almería!
