La DGT define la conducción eficiente como un estilo de conducción cuidadoso con el medio ambiente y que aprovecha al máximo los recursos del automóvil. Es decir, una manera de circular eficiente desde el punto de vista energético y medioambiental, que no malgasta ni una gota de carburante. A continuación te detallamos cuáles son los trucos que debes convertir en hábitos si quieres ser eficiente a la hora de conducir.
Circulando de manera eficiente: bueno para tu bolsillo, para tu vehículo y para el medio ambiente
1. Arranque para una conducción eficiente
Arranca el motor sin pisar el acelerador. En los motores de gasolina, inicia la marcha inmediatamente después de arrancar el coche, si por el contrario es diésel es aconsejable esperar unos segundos.
2. La primera
Usa la primera marcha sólo para arrancar. Inmediatamente después pasa a la segunda.
3. Cambio de marchas
Mete tercera a partir de los 30 km/h aproximadamente, la cuarta a los 40 km/h y la quinta por encima de 50 km/h. Si te fijas en las revoluciones, ten en cuenta que en los motores gasolina se debe cambiar entre las 2.000 y 2.500 r/min y en los diesel entre las 1.500 y 2.000 r/min
4. Velocidad
Lo más recomendable es mantener una velocidad constante, evitando frenazos y cambios de marcha innecesarios. El consumo de carburante aumenta en función de la velocidad elevada al cuadrado, es decir si pasas de 100 a 120 km/h el consumo aumenta un 44%.
5. Parada
En las paradas prolongadas, como semáforos o retenciones, es recomendable apagar el motor para evitar un consumo innecesario de carburantes.
Ten en cuenta estos consejos para cuidar tanto de tu coche como del medio ambiente, y de paso, de tu bolsillo.
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